No hay futuro posible
porque nada le es dado a quien no espera.
María Rosal
Me pintas con el beso
de tus labios,
mientras tus pupilas
miran la duda en mí.
La caricia de tu mano
me toca entero,
y mengua la duda
ocultando mis ojos.
Se adelanta el amor
alejándose la cordura
naciendo un tiempo sin ética,
solo un pensamiento
joven, alegre y efímero
guía mi desnudo.
Me aprieto
sobre tu cuerpo dormido
y te doy el beso
de mis labios.
Despierta mi ética,
y quiere repetir,
y quiere el beso
de tus labios.
Sé que irás con el viento
sólo las verdes hojas
te retendrán de nuevo.
Me miras,
pintándome con el beso
fugaz de tus labios
y dices: “apprends-moi donc une chanson”.